Reseña: Rebeldes de Susan E. Hinton

"¿Creía que él estaba mezclado en esto? Él no había matado a nadie, no se había roto la cabeza en una pelea, no era su colega el que había caído de un disparo bajo una farola, ¿qué tenía él que perder? Su viejo era rico, podía pagar cualquier multa que le cayera encima por andar borracho y meterse en una trifulca. "

Hoy estoy nostálgica, y me ha dado por rememorar una novela que me impactó mucho cuando era adolescente. Fue lectura obligatoria en mi instituto cuando yo tenía dieciséis años. Y creo que a los jóvenes de hoy en día puede gustarles, porque habla de temas que siguen siendo de actualidad: peleas de pandillas, maltrato en el hogar, lucha de clases sociales y violencia juvenil, entre otros.

El protagonista de la historia es Ponyboy, un chico de catorce años que vive en un barrio violento, donde las peleas y la delincuencia juvenil son la tónica habitual. Pony es huérfano, su hermano mayor ha tenido que renunciar a los estudios, y tiene dos trabajos para poder mantener a la familia. Su otro hermano ha dejado el instituto y trabaja en una gasolinera para redondear el presupuesto. Ambos hermanos están decididos a que nuestro protagonista estudie y haga algo de provecho con su vida. Pero por desgracia, no es tan sencillo escapar del ambiente donde se ha criado. 

El principal problema de Pony son los "socs", un grupo de niños ricos que tienen todo lo que pueden desear, pero aún así se aburren. Así que se dedican a perseguir y golpear a Ponyboy y su pandilla:

"Estábamos acostumbrados a ver a Johnny maltratado; su padre le sacudía bastante, y aunque nos cabreaba muchísimo no podíamos hacer nada. Pero aquellos golpes no tenían nada que ver con esto. Johnny tenía la cara toda cortada, amoratada e hinchada, y una cuchillada desde la sien hasta el mentón. Me quedé parado, temblando con un frío repentino. Pensé que podía estar muerto: seguro que nadie podía aguantar una paliza así y seguir vivo..."

Una noche, cuando Ponyboy y Johnny están solos en el parque vuelven a aparecer los socs, y esta vez la pelea sí que acaba con una muerte. A partir de ese momento toda la historia cambia. Leemos sobre una huída desesperada,  un acto de heroísmo, una agónica estancia en el hospital con alguien debatiéndose entre la vida y la muerte...Y durante todos esos episodios podemos seguir el diálogo interno de los personajes, y cómo evolucionan. Por ejemplo, estos pensamientos en la siguiente pelea que se describe en la novela:

"Antes fueron colegas, pensé, fueron amigos, y ahora se odian el uno al otro porque uno tiene que currar para ganarse la vida y el otro viene del West Side. No deberían odiarse el uno al otro...Yo ya no odio a los socs...No deberían odiarse."

Ponyboy es un joven muy reflexivo, y además inteligente. No cabe duda de que si hubiera nacido en otro ambiente podría hacer grandes cosas; eso hace que la historia sea tan dura, porque sabes que está condenado, y no se lo merece.

"En dieciséis años en las calles puedes aprender mucho. Pero todo equivocado, no las cosas que quieres saber. En dieciséis años en las calles ves muchas cosas. Pero todas equivocadas, no las que quieres ver."

Algo que me gusta de este libro es que no es maniqueo. Los socs también tienen voz y una oportunidad de explicarle al lector por qué actúan como actúan. La novela no te dice quiénes son los buenos y quiénes son los malos, te deja que tú juzgues por tí mismo.

"Estoy segura de que crees que los socs lo tenemos todo hecho. Pero no es así. Tenemos problemas de los que nunca has tenido noticia. ¿Quieres saber algo? Las cosas están muy crudas por todas partes. " 

En esta novela también hay algo negativo. El vocabulario es algo pobre, y la redacción, aunque no es mala, podría ser mejor. Pero en este caso esos errores están justificados, porque la autora publicó esta novela cuando tenía sólo diecisiete años. Ese es otro de los motivos por los que creo que a los adolescentes actuales podría gustarles este libro. La lectura es muy sencilla, es una novela corta y la historia tiene mucha fuerza.

¿La habéis leído?¿Qué os parece la propuesta? Como siempre estoy deseando leer vuestros comentarios.

Por hoy me despido con un beso para todos. ¡Hasta pronto!